Habitualmente andamos por la vida sumergidos en la queja por lo que no tenemos o lo que no nos va bien. Centrando así toda nuestra atención y energía en lo que nos falta.
Que te parecería poder dar un giro a tu visión. Poder cambiar de gafas y centrarte en lo que sí tienes, en lo que sí puedes.
Mejor, ¿verdad?
Pues hoy te comparto un ejercicio súper sencillo, divertido, agradable, bonito y rápido que descubrí y realizo desde hace dos años y que me encanta.
¿Preparada para cambiar el chip?
Ahí va mi secreto. Dentro vídeo 😉
Si te cuesta encontrar la satisfacción en tu día a día, te encuentras constantemente quejándote, agobiada, triste y preocupada. Te das cuenta que te estás convirtiendo en una madre que trabaja y cuida de sus hijos sin alegría. Te cuesta disfrutar de la vida.
Si estás verdaderamente comprometida contigo misma a solucionar lo que no funciona porqué estás cansada de sentirte culpable, sin ganas, nerviosa.
Ya sabes que ha llegado tu momento para cambiar esta situación por ti y tus hijos. Es para ti una prioridad sentirte bien.
Y quieres con todas tus fuerzas aprender herramientas que te ayuden a solucionar este malestar de hoy y prevenir los futuros reserva tu llamada de valoración para mi mayor y transformador programa individual, Mamá Feliz.